"posiblemente este no es el mejor blog, ni tiene el mejor diseño, posiblemente muy a fuerzas aparezca en las busquedas de google. pero lo mejor de rickardo esta aqui, y eso para un blog comun es mucho."

viernes, 5 de junio de 2009

Nowhere Else to Roam Tour 1993


La canción de Master Of Puppets era la que menos me gustaba.
Tuvieron que pasar meses enteros para que pudiera oírla completa, pues no pasaba del minuto 1, inmediatamente le cambiaba de canción. Por ahí de octubre del '92, mientras andaba en la escuela, recuerdo que conocí al hermano de un compañero de clase que me regaló un disco de ellos, su portada era negra y había un charco de sangre con un martillo ahí, decía "Kill 'em All".
Era la primera vez que oía aquellos guitarrazos y solos que te destrozan los oídos, pasaron semanas y seguía oyendo aquel disco (que en ese entonces solo era un cassette). Unos meses después llego a la casa de mi tío Francisco, en cuanto me vió, sacó de un cajón un par de boletos, eran aquellos boletos para el concierto que daría Metallica en el Palacio de los Deportes. Mi tío estuvo un mes entero convenciendo a mis padres de que me dejaran ir, incluso consiguió el "Album Negro" en cassette y los puso a oír aquella música, obviamente la más suave que se encontraba en el disco como "The Unforgiven" y "Notting Else Matters", mi madre se "enamoró" de ésta última, no podía dejar de oírla, pero a mi me aburría.
Llegó entonces el 25 de febrero de aquel 1993, me encontraba en los alrededores del coloso de Cobre, contaba entonces con sólo 8 años, y estaba a punto de ir al primer concierto de mi vida. Había de todo, playeras, encendedores, pulseras, gorras, etc que conmemoraban ese gran día, pero sobre todo, habían muchos "fans" de la banda que solo conocían 2 o 3 canciones de la banda.
Entré al recinto donde estaba en el centro una especie de escenario giratorio con pirotecnias, mi tío y yo tomamos asiento, estabamos fácil a unas 15 filas del escenario y la gente empezaba a abarrotar el Palacio. Esperé una media hora y las luces se apagaron, comenzó aquel himno abridor llamado Ecstasy Of Gold, obra de Morricone que la banda utilizaba para dar más emoción al público, de pronto se alzó en lo alto una bandera de mexicana y empezó la pirotecnia, y fue asi como sonó Enter Sandman.
Al terminar la canción muchas de las personas que estaban ahí abandonaron el lugar, cosa que me sorprendió tanto a mí como a mi tío, pero que al final agradecimos, pues eso nos dió oportunidad de escabullirnos hasta casi en las primeras filas donde habían rockeros en su mayoría y uno que otro perdido. La parte de arriba del coloso de cobre estaba vaciandose pero abajo estaba toda la banda en su esplendor, la mayoría solo para ver el arsenal de la banda desde el Kill 'em All de 1983 hasta el And Justice for All del '88.
Conocí varias canciones como "Creeping Death" o "Justice Medley" que fue la que tocaron casi al final. Abandonamos el lugar en la canción final que no era más que una "guerra" de guitarrazos y bajos que retumbaban el recinto. Alcanzamos a agarrar un pesero que nos cobró como $2500 de los viejos.
Un día después me enteraba de que Metallica estaría desde el 26 de febero hasta el 2 de marzo dando conciertos en el mismo lugar, pero los boletos estaban agotados.
¡Rayos! pensé.
2/4

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